En una olla grande, hierve agua con sal y cocina los fettuccine según las instrucciones del paquete hasta que estén al dente. Luego, escúrrelos y reserva.
En una sartén grande, derrite la mantequilla a fuego medio. Agrega el ajo picado y sofríelo hasta que esté fragante y ligeramente dorado.
Vierte la crema espesa en la sartén con la mantequilla y el ajo, revolviendo constantemente. Cocina a fuego medio hasta que la crema comience a hervir.
Reduzca el fuego a bajo y agregue gradualmente el queso Parmesano rallado, revolviendo constantemente hasta que la salsa se vuelva espesa y el queso se haya derretido completamente. Si lo deseas, agrega una pizca de nuez moscada para realzar el sabor.
Sazona la salsa con sal y pimienta al gusto.
Añade los fettuccine cocidos a la sartén con la salsa Alfredo y mezcla bien para asegurarte de que la pasta esté completamente cubierta.
Sirve caliente, espolvoreando un poco de perejil fresco por encima para darle un toque de frescura.